El refrán tradicional “nadie se arruinó tomando ganancias” sugiere que es siempre buena idea asegurar una ganancia, por más mínima que sea, en lugar de esperar por mayores rendimientos en un futuro incierto. Sin embargo, con el surgimiento de Bitcoin y su increíble crecimiento en los últimos años, este refrán parece quedar obsoleto.
La historia del Bitcoin y su expansión en la última década muestra que quienes confiaron en la criptomoneda y se mantuvieron firmes en sus apuestas, cosecharon eventualmente ganancias mucho mayores. En contrapartida, aquellos que decidieron realizar ganancias prematuras y, en ciertos casos, pérdidas en lugar de mantener, se encuentran hoy lamentando sus decisiones.
“No one ever went broke selling at a profit”I think >500 of btc reaches more than enough. So why not selling them now?
— Slope of Hope (@slopeofhope) June 18, 2015
Lo anterior no significa que invertir en Bitcoin esté exento de riesgos o que siempre se obtendrán rendimientos positivos. La oscilación de su precio puede llevar a pérdidas repentinas, incluso sustanciales, y no hay garantías de que el auge continúe de manera indefinida. Por eso, lo importante es:
- Analizar cuidadosamente la inversión antes de sumergirse en el mercado de las criptomonedas
- Informarse sobre cómo se comporta Bitcoin y las posibles causas de sus fluctuaciones
- Estar dispuesto a asumir los riesgos asociados a una inversión de este tipo y tener las expectativas realistas
Por tanto, no se trata de desestimar por completo la idea de tomar ganancias, sino de entender que algunas oportunidades de inversión, como la que representa Bitcoin, pueden desafiar las reglas tradicionales y ofrecer resultados inesperados si se apuesta por ellas con inteligencia y paciencia.